A través de la historia de la ufología han existido muchos relatos en los cuales los testigos afirman el haber tenido contacto cercano con seres que no pertenecen a este planeta, los hay muy variados desde encuentros positivos y pacíficos, donde los supuestos “alienígenas” dan un mensaje de paz y amor a la humanidad a través del contactado, mientras que otros son negativos donde los testigos pasan a ser simples cobayas o conejillos de indias para algún estudio médico- biológico dentro de las naves de los seres del espacio exterior. Ya sea una experiencia de contacto pacifico o de una abducción negativa, el testigo en esos casos tiene una idea general de lo que le está pasando en el momento y mediante las acciones de estos seres, se puede intuir que es lo que quieren o buscan, pero que pasa cuando esto no es así, cuando no existe una comunicación pacífica y positiva, o del otro extremo no estas siendo analizado desnudo en una mesa de operaciones por seres extraños observándote. Existe un caso en el cual se presentan unas criaturas extrañas a una granja entre la comunidad de Hopkinsville y Kelly, en el estado de Kentucky, en los Estados Unidos allá por el lejano año de 1955, lo que diferencia a este caso de otros de la casuística ovni, es la conducta errática que estas criaturas tuvieron para con los testigos, conducta que aterrorizo por horas a los protagonistas de este evento , pero vamos de fondo a la historia.
Ser avistado por la familia Sutton
Ubicación del pueblo de Hopkinsville
El domingo 21 de agosto del año de 1955, después del servicio religioso la familia Sutton en compañía de Billy Ray y su esposa Jane Taylor, quienes eran amigos de la familia se dirigieron a la granja propiedad de la familia Sutton, para pasar el resto del domingo descansando y divirtiéndose. La señora Glennie Lankford quien era madre de Elmer “ Lucky” Sutton, preparó una gran cena para los invitados, y después del banquete los hombres presentes se dispusieron a jugar cartas hasta el anochecer, en cierto momento Billy Ray se levanta de la mesa para salir de la casa y dirigirse al pozo por un poco de agua ya que se encontraba sediento por culpa de aquella calurosa noche de verano, mientras camina en la obscuridad de la noche rumbo al pozo algo llama su atención en el cielo nocturno, voltea hacía arriba y es ahí cuando ve un objeto luminoso con forma de platillo el cual parece que va impactarse en el suelo, pasa encima de él y parece que se posa en tierra detrás de la casa de los Sutton. Billy Ray asustado por lo que vio corre hacía la casa, entra y no tarda en contarle a todos lo que acaba de ver, todos pensando que era una broma comienzan a reír pero Billy convence a Elmer para que lo acompañe afuera de la casa para indicarle el lugar donde vio el objeto caer, los dos hombres salen para inspeccionar, se dirigen al pozo y no observan nada, justo cuando dan la media vuelta para regresar a la casa es cuando ven una luz a lo lejos del bosque que parecía acercarse y lo hacía desde el rumbo donde Billy había dicho que vio caer el objeto luminoso del cielo, los hombres esperaron pacientemente mientras que la luz se acercaba mas y mas hasta que frente a ellos, lo que pensaron que era una luz era un ser de al menos un metro de alto, con gran cabeza, ojos enormes con su pupilas de color amarillo, grandes orejas y brazos muy largos que casi rozaban el suelo, y con unas manos con grandes dedos con garras.
Aquí fue cuando comenzó la pesadilla, Billy y Elmer al ver esa extraña criatura a escasos metros de ellos, salieron corriendo despavoridos para refugiarse dentro de la casa, al llegar toman sus armas dos escopetas y se apuestan en las entradas de la casa, hacen esto mientras a la familia le cuentan lo sucedido, que vieron a un demonio. La familia sin saber que está pasando no tiene de otra que hacerles caso a los hombres quienes les ordenan ponerse a salvo en una recamara mientras ellos protegen los accesos de la casa, la Sra Lankford creyendo que su hijo Elmer y Billy se encuentran bromeando y ser escéptica de lo que le contaron se queda con ellos. Pasan un par de minutos cuando delante de Billy y la Sra. Lankford, del otro lado de la puerta de la casa, a escasos metros, en la obscuridad se aparece un ser de al menos un metro de altura con las mismas características que habían visto Billy y Elmer, solo que este ser se encontraba flotando, sus pies no tocaban el suelo, al ver esto la Sra. Lankford entra en pánico y grita, en ese momento Billy le dispara a la criatura y esta sale disparada del impacto, Billy en ese momento de angustia decide salir para ver si la criatura se encontraba herida así que se dirige a la puerta, la abre y mientras da algunos pasos, una enorme mano con garras aparece desde el techo y le acaricia el cabello a Billy, al ver esto su esposa June toma del brazo a Billy y le mete rápidamente a la casa, al estar adentro sin saber qué es lo que estaba pasando, en una ventana se aparece el rostro de uno de esos seres y este posa su gran mano en la ventana mostrando sus enormes garras, en ese momento uno de los hermanos de Elmer toma una escopeta y le dispara al ser quien tan solo se volvió a levantar y huyo hacía la obscuridad del bosque.
Elmer y Billy deciden salir afuera de la casa para inspeccionar y ver si habían herido algún ser que los estaban asustando a morir, salen armados y al estar observando el entorno de pronto se encuentran nuevamente con uno de estos seres que se encontraba en la rama de un arce, el ser al parecer flotaba de rama en rama y observaba a los aterrados hombres quienes comenzaron a dispararle a la criatura pero esta no le hacían ningún daño y solo se puso a flotar por las ramas del arce, en ese momento Billy y Elmer al darse cuenta que las armas no le hacían daño a esos extraños seres y que tampoco podían infundirles terror para que los dejaran en paz, decidieron regresar nuevamente y lo más rápido posible dentro la seguridad de la casa junto a su familia.
La familia decidió que era momento de huir de la granja y pedir ayuda, así que se organizaron, se armaron de balas y de valor y todos juntos salieron a introducirse rápidamente a sus dos camionetas que se encontraban afuera estacionadas, al entrar todos en los vehículos se dirigieron lo más rápido posible al pueblo de Hopkinsiville.
Al llegar a la estación de policía de Hopkinsville los recibió un policía de guardia el cual no podía creer lo que la familia Sutton le estaba narrando, que habían visto una luz que bajó del cielo a posarse detrás de granja y que unos extraños seres parecidos a “duendes” los estuvieron atemorizando por horas. Por lo que este oficial llamó a su superior Russell Greenwell para informarle la extraña situación con la familia Sutton, el Jefe Greenwell al escuchar todo esto inmediatamente pidió apoyo de la policía estatal, del Sherrif del condado de Christian e inclusive pidió apoyo de la base militar Fort Campbell. En total acudieron 16 agentes del orden (cuatro policías de la ciudad, cinco policías estatales, tres alguaciles y cuatro policías militares de Fort Campbell) junto a la familia Sutton de regreso a su granja para inspeccionar el lugar.
Al llegar de nuevo al lugar de los hechos, los oficiales de la ley se percatan de los destrozos por balas, estos dentro y fuera de la casa, de los casquillos percutidos tirados en el suelo de toda la propiedad, al estar inspeccionando observan una luz en el bosque pero al acudir a revisar no encontraron nada, después de todo esto los oficiales hablan con la familia Sutton de lo que vieron aquella noche, hablan por separado con cada integrante de la familia, se dan cuenta que su historia es consistente con la de los demás integrantes pero como no encontraron rastros de los seres o alguna otra anomalía deciden retirarse del lugar.
Periódico de la época informando sobre el evento de los Sutton.
Los Sutton entonces de nuevo en su hogar deciden quedarse ahí y tratar de dormir, ya que la experiencia los había cansado “a morir” por lo que van a la cama, todos menos Elmer quien decide montar guardia en una mecedora junto a su escopeta. Pasadas unas horas, como a las 3:30 horas de la madrugada, la Sra. Lankford la despierta un ruido que provenía de su ventana, al abrir los ojos ve de nuevo a una de las criaturas que la estaba observando dormir desde el otro lado de la ventana, espantada grita por ayuda, entra a la recamara Elmer y de inmediato le dispara a la criatura quien al recibir el disparo este no le hace ningún daño y el ser solo opta por salir huyendo como las veces anteriores. Elmer y Billy decidieron no dormir y hacer guardia hasta el amanecer, cuando esto pasó y el primer rayo de Sol apareció en el firmamento, la familia Sutton empacó sus cosas y se fueron de la granja, no sin antes avisar a los vecinos que se iban por todo lo que les pasó la noche anterior. Dos semanas después de los eventos la Sra. Lankford vendió la granja Sutton para no volver jamás.
Los escépticos de este caso dentro de los cuales se encuentran ufólogos como Renaud Leclet y Jerome Clark, además del miembro escéptico del Comité para la investigación escéptica Joe Nickell dentro de sus argumentos mencionan que la familia pudo haber confundido a estas criaturas con el Búho cornudo o al Búho real americano esto al estar bajo influjos del alcohol o drogas, ya que estas aves son nocturnas y además son agresivas cuando tratan de proteger a su nido, pero no hay indicio de que los integrantes de la familia Sutton estuvieran bajo los influjos de sustancia alguna, e incluso eran conocidos dentro de su comunidad por rechazar el consumo de alcohol.
Se dice que Steven Spielberg se inspiró en estos sucesos de Hopkinsville para realizar el largometraje que sería un éxito en taquilla “E.T. extraterrestrial” se dice que la persona que le dio a conocer este relato fue el Ufologo J. Allen Hynek quien fuera asesor científico para el programa “Libro Azul” de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.
Este caso es de los primeros que de niño escuché hablar sobre ufología y contactos con otros seres del espacio, y a modo personal siempre me lo ha parecido de lo más curioso ya que la actitud de los seres no se sabe si debe tomarse como pacifica o beligerante ante los aturdidos testigos que en una noche de domingo cualquiera, de diversión y risas, esta se transforma en una pesadilla tormentosa de la cual no pueden despertar, un evento que marcó sus vidas para siempre en sentido negativo.
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